Esta es una de conclusiones a las que se llegó en la I Conferencia Internacional sobre Brecha Digital e Inclusión Social llevada a cabo en San José de Costa Rica.
Organizada entre el 27 y 29 de febrero por el Programa de la Sociedad de la Información y el Conocimiento (Prosic) de la Universidad de Costa Rica y el Instituto Agustín Millares de la Universidad Carlos III de Madrid, la conferencia reunió a 140 especialistas de 14 países, que debatieron e intercambiaron ideas sobre como afecta a la sociedad la creciente brecha digital y sobre que políticas implementar para enfrentarla.
Una de las ideas que se escucharon con más fuerza es que generalmente cuando se habla de brecha digital se cree que se trata de un problema de acceso a las computadoras o a Internet, pero ese no sería el verdadero problema.
La costarricense Kemly Camacho, directora de la organización Sulá Batsú, dedicada a investigar la brecha digital, señaló: “La brecha digital es una brecha social, una brecha de información y de comunicación, y no solamente de tecnología”, y agregó “muchas veces se asume que los procesos de comunicación en un grupo se transformarán mágicamente cuando se lleve la tecnología, pero eso no ocurre. Cuanto más se provee solamente acceso, más se promueve la brecha digital”.
Proveer las herramientas necesarias para que los ciudadanos sepan sacarle provecho a las herramientas que las nuevas tecnologías les proveen es entonces un paso fundamental para comenzar a reducir esa brecha . Y se trata de educar todos señalan que son los Estados los que deben hacerse cargo de esa primordial tarea.
l desarrollo de la conferencia se estructuró en cuatro grandes problemáticas: la definición de brecha digital, ámbitos en donde se manifiesta con más fuerza, cuales son los criterios que se más certeros para medir la misma, y por último se analizaron las políticas que deberían aplicarse para reducirla y promover la inclusión social, entre ellos educación, formación y acceso a la infraestructura.
Es que en tiempos de la Sociedad del Conocimiento, donde el máximo capital ya no es el dinero, sino la información, carecer de los mismos implica quedar prácticamente desconectado del mundo.
Las nuevas tecnologías son herramientas que nos maravillan cada día y que suelen hacernos la vida más fácil, sin embargo sino se aplican la políticas adecuadas.
FUENTE:Artículo extraido de www.nexmedia.com.ar
